San Luis es la segunda provincia menos transparente de la Argentina

Durante el último tiempo organizaciones y entidades que indagan sobre la transparencia institucional y el acceso a la información ubicaron a San Luis en los últimos puestos.

En esta oportunidad el índice 2020 de Transparencia Presupuestaria Provincial (ITPP) del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) posicionó a la administración de Alberto Rodríguez Saá como la segunda con peor desempeño.

El ITTP evalúa la cantidad, nivel de detalle y grado de actualización de la información presupuestaria y fiscal que las diferentes jurisdicciones publican en las páginas web oficiales.

Según publicó el Centro, el promedio nacional cayó de 7,8 en 2019 a 7,2 en este año. Se trata de la puntuación más baja desde 2017.

San Luis, por su parte, tuvo una nota de 3,85 en el 2020, misma que el índice anterior.

Completan la lista de los distritos con puntajes más bajos Corrientes (1,60), Chubut (4), Santiago del Estero (4,15) y Buenos Aires (5,85).

Del otro lado de la tabla se ubicaron Santa Fe y Entre Ríos con 10 puntos, y lo completan Córdoba (9,90), Neuquén (9,50) y la ciudad de Buenos Aires (9,40).

La transparencia en una cuenta pendiente del Gobierno de Rodríguez Saá. Sin ir muy lejos por estos días un manto de duda cae sobre la campaña vacunación contra el Covid-19.

A la hora de detenerse en la provincia, el estudio elaborado por Juan Pablo Niño y Santiago Lacroix Eussler hizo foco en la ejecución y rendición de cuentas.

“En 2020 se observa que dos provincias (Corrientes y San Luis) no reportan datos sobre el mismo ejercicio”, publicaron.

A su vez lo compararon con otras jurisdicciones: “Otras dos (Buenos Aires y Chubut) lo hacen con un rezago de entre siete y nueve meses, y otras cuatro (Jujuy, Misiones, Santiago del Estero y Santa Cruz) con rezago de entre cuatro y seis meses”, indicaron.

El CIPPEC es una organización independiente, apartidaría y sin fines de lucro que busca “promover mejores prácticas en el sector estatal y el desarrollo de más y mejores profesionales con vocación por lo público, para que el Estado pueda responder a las necesidades de la población”.

El análisis destacó dos conclusiones a nivel general: que varias jurisdicciones cambiaron de gobierno (de partido o de dirigentes) y que el 2020 “pudo haber sido un año de adaptación para gobiernos que habían comenzado su administración pocos días antes del inicio del año”.

San Luis no integra ninguna de las dos clasificaciones debido a que se mantuvo la misma gestión.

Otro factor que explicó Lacroix Eussler es que la pandemia cambió las prioridades de política pública y los recursos con que los gobiernos cuentan para gestionar.

“Sería razonable suponer que la calidad de la gestión estatal provincial se viese afectada por la pandemia, pero no alcanza para ser una razón válida para disminuir la rendición de cuentas de los gobiernos”, indicó.

A su vez puntualizaron en la importancia de que los gobiernos publiquen los datos presupuestarios: “La transparencia en la administración de estos recursos es clave, no solo como mecanismos de control ciudadano, sino como herramienta de gestión”.